La Dragonera es probablemente la menos conocida de las Islas Baleares y es como la guinda del pastel situada delante del extremo suroeste de Mallorca.
La isla deshabitada que mide 3,8 km de largo y 900 m de ancho fue declarada parque natural en 1995. En la Islas Baleares es considerada el símbolo de la conservación natural por excelencia. Gracias a la lucha del movimiento ecologista naciente contra la urbanización por un proyecto hotelero de gran dimensión que incluía la construcción de un puerto en los años 70 su desarrollo se controló con éxito.
La Dragonera es básicamente la continuación de la sierra de Tramuntana que se extiende desde San Telmo hasta Pollenca a lo largo de la costa oeste de Mallorca
El canal entre la Dragonera y Mallorca mide apenas 780 m en la parte más estrecha. Na Popi, el faro más antiguo de la Dragonera se encuentra a 360 m de altitud.
Al igual que la sierra de Tramuntana altos alcantilados caen sobre el mar hasta tocar el fondo en su parte exterior del oeste. Por el lado este las pendientes son más suaves.
Impresionante mundo subacuático
ABUNDANTE FLORA Y FAUNA
Además de su importancia histórica la Dragonera es principalmente un tesoro ecológico. La isla es el hogar de muchas especies vegetales y animales endémicas, por ejemplo, una especie de lagartijas. Cabe destacar la abundante avifauna de la isla. La colonia de halcones de Eleonor que habita la isla es la más grande de toda España.
En el centro de información en la Dragonera un capítulo entero está dedicado a la rica vida marina que se encuentra alrededor de la isla. El parque natural se extiende por toda esta zona y llega hasta San Telmo incluyendo la isla Dragonera, la isla Mitjana y la isla Pantaleo. En la actualidad, el Gobierno y el Consell de Mallorca discuten sobre una ampliación del parque natural que incluiría grandes partes de la sierra de Tramuntana.